[dropcap]F[7dropcap] ue hace 44 años. Justo el Domingo 25 de Junio en punto de las 19:00 horas tiempo de Inglaterra, el Ave Madrugadora (Early Bird), el primer satélite destinado para uso comercial, se encarga de dar una prueba de los grandes cambios que la humanidad traería en las siguientes décadas con la Globalización.

Era el año 1967, en donde Jimmy Hendrix había sacudido a toda la élite rockera británica con sus desesperados, iracundos y geniales solos de guitarra; donde The Byrds se atrevían a interpretar a Bob Dylan con una guitarra eléctrica Rickenbacker 360 de 12 cuerdas en lugar de la tradicional guitarra folk, donde San Francisco se empezaba a hacer famoso por albergar por un corto tiempo la semilla del Flower Power. Era la época de un mundo dividido en dos ideologías opuestas que imponían su influencia a punta de pistola, que se debatían en la llamada guerra fría y peleaban cual si fuesen niños para ganar la carrera espacial.

La antesala al Mayo de 1968 en París se gestaba, la guerra de Vietnam tenía problemas para contabilizar el número de bajas de ambos bandos; es el momento en donde The Beatles de la mano de George Martin había dejado caer en los prometedores campos creativos del Rock, esa bomba llamada Sgt. Pepper’s Lonely Hearts Club Band; causando devastación, tristeza y desolación en muchos artistas que competían por atraer los reflectores de la escena y alcanzar los primeros lugares de aquella carrera creativa musical.

[pullquote_left]Ante tal belicosa atmósfera, el canal estatal de Inglaterra, la BBC, idea un programa de Televisión vía satélite, que permitiría por primera vez en la historia, enlazar en vivo 14 distintos puntos del planeta;[/pullquote_left] las reglas eran que ningún mandatario o cabeza de estado apareciese en la transmisión y la finalidad era dar una breve muestra de la cultura de cada país participante, al final se produjo un programa en un formato de 2 horas 30 minutos; contaba con la participación de artistas de la talla de Pablo Picasso y María Callas. En el caso de Inglaterra, The Beatles sería el representante para interpretar un mensaje que diera un respiro como respuesta a los conflictos armados que se desataban en todo el mundo, destacando de tal manera que años después se convertiría en la parte mas recordada de aquella transmisión.

El programa salió al aire en mas de 30 países a lo largo de los cinco continentes del mundo. Se calculó una audiencia que superaba los 400 millones de personas, que disfrutaron en vivo las bondades tecnológicas de aquel entonces a través de su aparato receptor. Ante estas expectativas y tomando en cuenta tal impacto; el Cuarteto de Rock más famoso de aquella época, se tomaría las cosas en serio. Existen distintas versiones que aseguran que se le encargó al grupo una canción que ilustrara el espíritu diplomático del Reino Unido, otros que ésta ya estaba hecha anteriormente y otros más que estaba en proceso y se aprovecho tal suceso para terminarla y usarla para dicha ocasión. Sin embargo aquel día se presentó una canción en donde se percibe a un Lennon, principal compositor de la pieza, con un discurso, filosófico y fundamental para el momento que la humanidad vivía; en dirección un tanto distinta a su compañero de composición McCartney que aún intentaba digerir el trauma que le causó el éxito anterior. Una melodía nada común, en un ritmo aún menos común: comenzando con una inusual introducción en 7/4, seguido de dos tiempos más en 7/4, y finalizando esa introducción a ritmo de 8/4. Dando pié a líricas que repiten incansablemente la palabra que más se menciona no sólo en esta canción, sino en todo el catálogo Lennoniano : Love; seguido de un tradicional coro en 4/4 que repite una frase que se convirtió en uno de tantos himnos de aquella época, All you need is Love.

Al observar la transmisión se percibe una atmósfera de celebración; en donde se siente que es el momento adecuado en para apelar al amor entre todos los seres humanos. En un foro lleno de flores y letreros se reproducen en varios idiomas el mensaje de la canción. Algunos detalles quedan fuera del alcance de las cámaras; ya que con dificultad se intenta difundir a través de las ondas de radio, que Ringo Starr aparece muy alejado de sus otros tres compañeros para no interrumpir los microfonos de los vocalistas; justo atrás del pequeño público que se compone de personas como Mick Jagger, Eric Clapton, Pattie Harrison, Donovan, quienes se pierden entre los asistentes que yacen en el suelo a los piés del grupo. Paul McCartney había dejado su tradicional bajo Höfner para colgarse otro Rickenbacker que usaría durante un corto tiempo; George Harrison sentado al frente de sus compañeros estrena una Fender Stratocaster que él mismo pinta de colores, todos en una escena por demás relajada.

Las cámaras captan a un Lennon que pasa la mayor parte de la canción concentrado, con los ojos cerrados; entonces resulta fácil percibir un sentimiento que se antoja como una mezcla entre el compromiso social, el ánimo fraternal por encima de la competencia creativa, la búsqueda interior y una gran y sincera respuesta a ese mundo dividido en el cual el Guitarrista y fundador del cuarteto vivía. Lo dijo justo en el momento más importante para la banda; un mes antes de que Brian Epstein, manager y pieza fundamental muriera, dejando un hueco que nadie pudo llenar y que sería una de las razones por las cuales el grupo perdería la cohesión. Justo antes de que se embarcaran en el viaje a Rishikesh con el Mahareshi Mahesh y de donde regresarían desilusionados y encaminados para acabar con la banda más exitosa de Liverpool un par de años después.

Estando en la cima del éxito, valiéndose de los avances tecnológicos y eligiendo un momento clave, dieron un mensaje a una gran parte del mundo con un buen fin: devolver la fé en la humanidad que por aquel entonces estaba muy gastada. Muy por encima de sus propios egos, se encontraba esa genialidad que tanto influenció en la cultura, emitiendo un discurso que devendría en futuros estereotipos y poses que aún en la actualidad son tema recurridos, tanto en cultos religiosos, promesas políticas y hasta en la forma que le hablas a tu novio o novia cuando la quieres conquistar. Es una de las expresiones más comunes y más requeridas por el ser humano, un tanto ideal pero no equivocada; deberíamos seguir recordando que todo lo que necesitamos es amor.